El Santo Padre desea que este galardón “pueda animar a otros a emprender iniciativas que promuevan la coexistencia pacífica y sean un signo de cooperación fructífera entre personas de diferentes religiones al servicio de toda la humanidad”.
El Santo Padre desea que este galardón “pueda animar a otros a emprender iniciativas que promuevan la coexistencia pacífica y sean un signo de cooperación fructífera entre personas de diferentes religiones al servicio de toda la humanidad”.