Prefecto del Dicasterio para las Iglesias Orientales
La Cumbre concluyó con la Declaración de Bakú
Terrorismo y conflictos armados
Defender los valores éticos y espirituales
El cardenal Claudio Gugerott a Cumbre Mundial de Líderes Religioso.
La Cumbre Mundial de Lideres Religiosos, bajo el lema “Las Religiones del Mundo por un Planeta verde”, se celebró los días 5 y 6 de noviembre en Bakú, capital de la República de Azerbaiyán, organizada en el marco de la COP29.
300 líderes religiosos
En este encuentro internacional, de gran significado interreligioso, han participado 300 lideres religiosos, la gran mayoría musulmanes, junto a los de otras Confesiones (católicos, ortodoxos, judíos, hindúes, budistas, etc.).
Entre los católicos, invitados por el Gobierno azerí, destaca la presencia de Mons. José Luis del Palacio, obispo emérito del Callao (Perú), del experto en Relaciones Iglesia-Estado el sacerdote Silverio Nieto y del profesor de Derecho Constitucional y Europeo, José Antonio Soler.
Este encuentro contó con el patrocinio del Presidente Alíyev y fue organizada conjuntamente por el Gobierno de Azerbaiyán, por diversas Instituciones religiosas musulmanas, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, la Presidencia de la Cumbre Mundial sobre el Cambio Climático (COP29) y, de forma significativa, por el Sheikh ul-Islam Allahshukur Pashazadeh, presidente del Departamento Musulmán del Cáucaso, que contribuye de manera muy destacada al desarrollo del diálogo interreligioso e intercultural. Prueba de ello es que los últimos tres Papas (Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco), han visitado este país.
Prefecto del Dicasterio para las Iglesias Orientales
En representación de la Santa Sede estuvo presente el Cardenal Gugerotti, Prefecto del Dicasterio para las Iglesias Orientales, que reconoció que el respeto y la atención estatal a la religión en Azerbaiyán, así como la tolerancia hacia las distintas confesiones, son un ejemplo para otros países.
En su intervención ante el Pleno de la Cumbre de Líderes Religiosos, Mons. Del Palacio, tras citar la encíclica “Laudato si´”, destacó que “los católicos nos preocupamos por el cambio climático porque sus efectos repercuten sobre todos los seres vivientes, de manera mucho más grave sobre los más vulnerable”.
En este sentido, afirmó que “el papel de la religión es educativo y transformador y el medio ambiente puede protegerse desde la fe” por lo que “sería un grave error dejar de lado a las tradiciones religiosas en la labor de concienciación y transformación de nuestras sociedades”.
La Cumbre concluyó con la Declaración de Bakú
Los participantes pusieron de relieve la necesidad de mejorar la colaboración entre los líderes políticos, sociales y religiosos para abordar los desafíos ambientales y el cambio climático y fomentar el diálogo global.
La Cumbre concluyó con la Declaración de Bakú, recordando la importancia del documento Conjunto “Fraternidad humana, por la paz mundial y la convivencia común”, firmado por el Papa Francisco y el Gran Imán de Al-Azhar, Ahmad Al-Tayyeb, en Abu Dabi, el 4 de febrero de 2019, para el desarrollo de la cooperación interreligiosa.
Terrorismo y conflictos armados
Los líderes religiosos destacaron la necesidad de celebrar periódicamente eventos interreligiosos de este tipo para que las diferentes religiones del mundo puedan reunirse para expresar una posición común sobre los problemas que amenazan al mundo moderno; expresando su “profunda preocupación por los devastadores conflictos armados, los actos de terrorismo y la violencia por motivos religiosos y étnicos”, que afecta a víctimas inocentes, produce desastres ambientales y la destrucción del patrimonio cultural y religioso.
Defender los valores éticos y espirituales
En la declaración se hace un llamamiento a la urgente necesidad de defender los valores éticos y espirituales, “reconociendo la santidad de la vida humana y la naturaleza y la protección de todos los seres vivos”.
La Declaración final de la Cumbre Mundial de Lideres Religiosos concluyó exhortando a los Estados, a las organizaciones internacionales y a las distintas religiones a hacer frente de forma conjunta a “los intentos de los grupos terroristas y extremistas de utilizar el nombre de la religión para sus fines insidiosos”, y a “estimular la educación de los jóvenes en el ámbito de la igualdad, la fraternidad humana, el respeto de la diversidad religiosa, cultural y étnica así como a la protección del medio ambiente”.
Cumbre mundial de líderes religiosos en Azerbaiyán.