Se hacen eco de esta noticia la mayoría de los medios argentinos. Y no es para menos. El sacerdote argentino no ha rectificado y, por lo tanto, el Papa Francisco le ha excomulgado por delito de cisma.
Elisabetta Piqué, la corresponsal argentina en el Vaticano, lo cuenta en La Nación: "Francisco excomulgó a un sacerdote argentino que lo acusa de ser el “antipapa". Fernando María Cornet, que es párroco en Italia, escribió un libro que asegura que la renuncia de Benedicto XVI, en febrero de 2013, no fue válida y que la consecuente elección de Bergoglio, tampoco".
Según parece, este sacerdote argentino, que es párroco en la ciudad de Sassari, en Cerdeña, comenzó a investigar sobre si Jorge Mario Bergoglio era, o no, el sucesor de Pedro.
En varias entrevistas de su canal YouTube, asegura que ha profundizado sobre el tema. Y tras una investigación, ha llegado a la conclusión de que la renuncia de Benedicto XVI, en febrero de 2013, había sido inválida y que la consecuente elección de su compatriota, Jorge Mario Bergoglio, el 13 de marzo del mismo año, también.
Su investigación le llevó a publicar el libro ¿Habemus antipapam? y por este libro y por no retractarse de sus afirmaciones, él mismo se ha separado de la Iglesia al no rectificar.
Según contó en una de las entrevistas que aparecen en YouTube, Cornet se esperaba esta condena. De hecho, según afirmó, era consciente que, al escribir el libro, “habría sido perseguido por quien ocupó ilegítimamente un lugar que no le corresponde, haciendo entrar en crisis a la Iglesia con decisiones ilegítimas y designaciones de obispos también ilegítimas”.
Cornet ha relatado que a mediados de mayo, una carta oficial del Vaticano lo puso en guardia: “Me pidieron que retirara el libro de circulación, que manifestara públicamente que tenía errores, que pidiera perdón y que reconociera al papa Francisco como legítimo Papa”, dijo. “Pero no podía hacerlo porque no es así y además porque nadie del DDF (Dicasterio para la Doctrina de la Fe) supo explicarme cuáles son los errores de mi libro, nunca nadie me dio un argumento”, recoge La Nación.
En agosto pasado, recibió otra carta que le comunicaba que había sido acusado de cisma y que tenía 15 días para defenderse. Algo que tampoco hizo, por lo que, finalmente, le llegó ahora la excomunión.
“Es claro que, si considero a Bergoglio el Antipapa, su decisión no tiene valor”, reaccionó Cornet, según ha publicado el diario L’Unione Sarda, que precisó que el sacerdote argentino habló justo antes de recibir al arzobispo de Sassari, monseñor Gianfranco Saba, que se presume que fue a verlo para hacerle firmar la notificación papal.
Una pena.
Zenón de Elea.