Persecución de los católicos en Gran Bretaña
Enrique VIII, Lutero, Tomás Moro....
Santiago Mata con José Francisco Serrano en la presentación del libro.
Santiago Mata es, sin duda, uno de los más prolíficos escritores católicos del presente. Cuando estaba terminando de leer este libro que ahora nos ocupa ya me llegaba una nueva aportación editorial suya.
Historia del martirio
En los últimos tiempos nos ha regalado lo que podríamos denominar una historia, en fragmentos, del martirio.
Es decir una serie de libros que tienen como argumento principal el martirio. Ese martirio de cristianos que ocurre en diversos lugares del mundo y de diversos tiempos como realidad y signo de lo que significa el límite al poder temporal y el límite a lo que se opone a la presencia de Cristo.
Podríamos decir que sólo en los últimos años tenemos su “Mártires cristianos bajo el nazismo”, “Mártires del Japón” y ahora “Mártires de Inglaterra”.
Antes tuvimos los referidos a la persecución religiosa en la España del siglo XX. También ha dedicado un libro, no lo olvidemos, a Monseñor Oscar Romero, “pasión por la Iglesia”.
Testigos del Evangelio
La literatura sobre el martirio forma parte del ADN de la literatura cristiana desde el minuto uno. No voy a hacer referencia a las Actas de los mártires, a los martirologios, ni a las Pasiones, ni a la abundante bibliografía en la época patrística, ni a la literatura espiritual sobre esta forma sublime del testimonio cristiano.
Hay, sin duda, en nuestro tiempo, en el siglo XX y el XXI, el XX, siglo de los mártires, una especial necesidad de historias de los mártires, es decir, de los testigos en coherencia sustantiva de Evangelio.
No voy a negar que esta “santa obsesión” de Santiago Mata por el martirio tiene un mensaje de fondo, que se percibe con cierta claridad en las conclusiones de este libro a las que me referiré en breve.
Persecución de los católicos en Gran Bretaña
Principalmente el mensaje del valor y significado de la conciencia, de lo que significa ese espacio y tiempo de intimidad con Dios, frente a los múltiples poderes que atentan y quieren acabar con la vida, con la vida espiritual como expresión de la vida biográfica.
En esta ocasión se adentra en un tiempo y en un caso, el de la persecución a los católicos en Gran Bretaña e Irlanda en los siglos XVI y XVII, con abundante utilización de fuentes en lengua inglesa contemporáneas.
Arranca el libro con la descripción de la figura del Enrique VIII. Un personaje que sigue generando muchas preguntas. Por ejemplo, ¿fue solo la cuestión matrimonial, su voluntad de casarse con Ana Bolena, la que determinó el inicio del cisma? Evidentemente, no.
De ahí que haya que remitirse a otros acontecimientos, como por ejemplo el del Estatuto del “Praemunire” de 1392 para analizar la pretensión de independencia de la potestad papal.
A partir de ahí, nos habla nuestro autor de los mártires de 1535, del avance del luteranismo, Eduardo VI, María Tudor, Isabel I, Jacobo I y el complot de la pólvora, Carlos I y la guerra civil, Carlos II, el complot de Oates y la revolución, y los mártires de la Florida española.
Enrique VIII, Lutero, Tomás Moro....
Hasta llegar a la conclusiones en las que, diríamos, que nuestro autor se destapa para plantear al lector cuestiones de interpretación histórica, como la de si fue más moderno Enrique VIII que Lutero, y en qué sentido. O la de la potestad papal, o la del rol y la vocación de los laicos, Tomás Moro en el trasfondo, o la del poder en y de la Iglesia.
Son muchas las vida de hombres y mujeres, por ejemplo Luisa de Carvajal y Mendoza, todo un descubrimiento, o el obispo Juan Fisher, otra joya, que fascinan.
Mártires de Inglaterra
Santiago Mata
Sekotia
Mártires de Inglaterra.