Estado clínico estable y sin fiebre
El papa Francisco interrumpió la lectura de su homilía debido a "dificultades en la respiración" el pasado 9 de febrero.
Las alarmas saltaron y la noticia se hizo viral cuando ayer hacia las 13:00 horas los médicos del Policlínico Agostino Gemelli de Roma dieron el siguiente informe médico: “Los resultados de las pruebas realizadas en los últimos días y hoy han demostrado una infección polimicrobiana del tracto respiratorio que ha obligado a modificar aún más la terapia. Todas las pruebas realizadas hasta el momento son indicativas de un cuadro clínico complejo que requerirá de un internamiento hospitalario adecuado”.
Así lo informa un comunicado de la Oficina de Prensa de la Santa Sede que actualiza las condiciones de salud del Papa Francisco, hospitalizado desde el pasado viernes 14 de febrero en el Policlínico Agostino Gemelli de Roma y continuar en ambiente hospitalario su tratamiento para la bronquitis.
Estado clínico estable y sin fiebre
A última hora de ayer, otro comunicado de la Sala de Prensa de la Santa Sede informaba que el Papa Francisco tiene un estado clínico estable, y “está conmovido por los numerosos mensajes de afecto y cercanía que sigue recibiendo en estas horas”.
“El Santo Padre sigue sin fiebre y continúa con la terapia prescrita. Su estado clínico es estable. Esta mañana ha recibido la Eucaristía y después se ha dedicado a algunos trabajos y a la lectura de textos. El Papa Francisco está conmovido por los numerosos mensajes de afecto y cercanía que sigue recibiendo en estas horas; en particular, desea dirigir su agradecimiento a los que se encuentran hospitalizados, por el afecto y el cariño que le expresan a través de dibujos y mensajes de buenos deseos; reza por ellos y pide que recen por él”, dice el comunicado.
El Papa descansa bien
Además, también se informó que el Santo Padre descansa bien, ha pasado las noches tranquila y se dedica también a leer algunos periódicos, ha explicado el portavoz Matteo Bruni a los periodistas reunidos en la Oficina de Prensa del Vaticano. “Las terapias continúan naturalmente”, añadió Bruni quien recordó que de momento no hay previsiones sobre su alta hospitalaria y que al Papa se le aplica la regla del "absoluto reposo".
"Tengo que cuidarme"
A pesar de todo, el Papa no quiso faltar a la cita diaria con la parroquia de la Sagrada Familia de Gaza, la visita puntual a las 19 horas con el párroco padre Gabriel Romanelli y todos los refugiados entre la parroquia y el colegio.
El propio Romanelli lo confirmó por teléfono a los medios vaticanos, explicando: “El Santo Padre nos llamó los dos primeros días de hospitalización, la gente estaba esperando a las 20.00 (hora de Gaza) como siempre y a pesar de que teníamos un apagón en toda la zona de Gaza City, insistió y logró contactarnos con una videollamada. Nos preguntó cómo estábamos, cómo estaba la situación, nos envió su bendición. La gente le mostró su cercanía, él les agradeció y les dio su bendición”. “Escuchamos su voz. Es cierto, está más cansado. Él mismo dijo: Tengo que cuidarme. Pero su voz era clara, nos escuchaba bien”, enfatizó el sacerdote argentino.
Un mensaje al párroco de Gaza
El P. Gabriel reveló que el Papa Francisco le envió un mensaje escrito a su móvil. “Me envió un pequeño mensaje diciéndome que agradecía mi cercanía y mis oraciones y correspondía con su bendición. Esperamos que la recuperación se produzca pronto y que pueda volver a San Pedro para continuar su misión y su trabajo", subraya Romanelli.