El libro “No tengo miedo, no lo tengáis vosotros” muestra la figura Alexéi Navalni, la voz más firme contra Putin
Comprometido con Rusia y la libertad  Un camino de conciencia libre Su fama se extendió por todo el mundo En lugar de exiliarse decide volver a Rusia "Creo en Dios, creo que Rusia será feliz y libre"  Más de 15.000 personas en su funeral  Agentes de policía detienen a uno de los líderes del movimiento […]

Comprometido con Rusia y la libertad 

Un camino de conciencia libre

Su fama se extendió por todo el mundo

En lugar de exiliarse decide volver a Rusia

"Creo en Dios, creo que Rusia será feliz y libre" 

Más de 15.000 personas en su funeral 

Agentes de policía detienen a uno de los líderes del movimiento de protesta, Alexei Navalny, en la plaza Pushkinskaya de Moscú, el 5 de marzo de 2012, mientras los manifestantes se niegan a abandonar el lugar al final de su manifestación más grande. Foto de Alexander NEMENOV / AFP

Durante casi tres lustros Alexéi Navalni fue la voz más firme contra la dictadura de Vladímir Putin y la corrupción generalizada del sistema.

Perdió la vida hace exactamente un año, 16 de febrero de 2024 en las cárceles siberianas de Putin, durante su cautiverio en un complejo penitenciario de máxima seguridad en el Ártico. Todavía no se ha aclarado la causa de su muerte.

Comprometido con Rusia y la libertad 

Ediciones Encuentro publica ahora No tengo miedo, no lo tengáis vosotros, que muestra la figura de un hombre comprometido con Rusia y la libertad hasta el punto de sacrificarlo todo.

Este libro reúne un conjunto de reflexiones públicas y privadas de Alexéi Navalni. Desde entrevistas concedidas a Der Spiegel, Time y The New York Times a intervenciones pronunciadas en las salas de tribunales durante innumerables juicios; desde cartas escritas en la cárcel a publicaciones en diversas redes sociales, estos escritos dan cuenta de la maduración política y espiritual de Navalni.

Un camino de conciencia libre

Una trayectoria que abarca el nacionalismo inicial del que surgió a la lucha por la democracia liberal y contra la corrupción, y desemboca en los últimos y dramáticos años de prisión, donde emerge la figura de un disidente de una profundidad sorprendente: un hombre dispuesto a morir por sus convicciones, por lo que cree, a favor de la libertad, la verdad y la belleza futura de Rusia. Un camino de conciencia libre, contra el miedo y el odio materializados en los regímenes totalitarios.

Alexéi Navalni (1976-2024) encarnó la tenaz resistencia al sistema autoritario de Putin. Su parábola, marcada por el coraje y la adversidad, puso de relieve la represión política en Rusia e inspiró la esperanza en un futuro democrático.

Envenenado en 2020, regresó a Rusia en 2021, para ser inmediatamente detenido y encarcelado. En 2021 recibió el Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia. El documental Navalni en 2023, de D. Roher, ganador de un Oscar, cuenta su historia. Su trágica muerte en una colonia penal del Ártico ruso ha suscitado dudas y acusaciones sobre el régimen.

Su fama se extendió por todo el mundo

El calvario de los arrestos, condenas y encarcelamientos comenzó en 2012. Navalni ya se había significado por su activismo político y por denunciar la corrupción generalizada del sistema. En 2013 se presentó a las elecciones a la alcaldía de Moscú y quedó segundo, por detrás del candidato oficialista.

Su fama se extendió por todo el mundo debido a sus vídeos documentales sobre la corrupción del primer ministro Medvedev y, en especial, el que dedicó al palacio que Putin se construyó a orillas del Mar Negro. Este vídeo, que grabó con la ayuda de un dron, acumula 130 millones de visitas. Convocaba manifestaciones a las que acudían más de 100.000 personas regularmente.

Navalni fue condenado tres veces: en 2021 a dos años y medio de prisión; en 2022 a nueve años y en 2023 a 19 años por "extremismo". El 20 de agosto sufre un envenenamiento con un agente tóxico llamado Novichok. Su vida se salva gracias a una intervención médica de urgencia y al tratamiento que recibe en Berlín.

En lugar de exiliarse decide volver a Rusia

Entonces, toma la decisión más importante y heroica de su vida. En lugar de exiliarse decide volver a Rusia sabiendo que solo le esperan cárcel, torturas y probablemente la muerte. "Tengo mi país y mis convicciones y no puedo traicionar ni al primero ni a las segundas. Si tus convicciones valen algo debes estar dispuesto a defenderlas. Y, si es necesario, debes estar dispuesto a aceptar sacrificios", diría tres años después de su regreso.

"Creo en Dios, creo que Rusia será feliz y libre" 

A medida que se endurecen los castigos, Navalni se siente más libre y con menos miedo. En 2023 se publica una entrevista en la que el opositor expone las certezas que le impulsan: "Creo en Dios y en la ciencia. Creo que vivimos en un universo no determinista y poseemos el libre albedrío. Creo que en este universo no estamos solos. Creo que nuestras acciones y nuestras decisiones serán juzgadas. Creo en el verdadero amor. Creo que Rusia será feliz y libre. No creo en la muerte".

Navalni nunca perdió la sonrisa. Una de las notas características de todos su artículos, cartas e incluso declaraciones ante los tribunales es su sentido del humor. Otro de los rasgos que más le definían es el de ser un hombre profundamente enamorado de su esposa. Las últimas líneas que escribe solo dos día antes de su muerte son para felicitar a su mujer por San Valentín: "Mi pequeña: nos separan ciudades, las luces de despegue de los aeropuertos, tormentas azules y miles de kilómetros. Pero cada segundo te siento cercana y te quiero cada vez más".

Más de 15.000 personas en su funeral 

Puede parecer que la muerte de Navalni fue un sacrificio inútil, pero la semilla que cayó en tierra empezó a dar fruto desde el día de su funeral al que acudieron más de 15.000 personas venciendo el miedo a ser fichados por el servicio de seguridad ruso. En los tres días posteriores más de 30.000 llevaron flores a su tumba, un gesto que se repitió en otras 230 ciudades y aldeas de toda Rusia. El movimiento de disenso iniciado por Alexéi Navalni no ha muerto con él. Su figura sigue inspirando la lucha por la libertad y la democracia en todo el mundo.

El martes 25 de febrero a las 19:00 horas tendrá lugar en la Fundación Ortega-Marañón de Madrid (Calle Fortuny 53) la presentación del libro a cargo del director del Real Instituto Universitario de Estudios Europeos, José María Beneyto y la catedrática de Ciencia Política y exembajadora de Polonia, Anna Sroka.

El libro "No tengo miedo, no lo tengáis vosotros"

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