Con diez de 15 votos a favor, con el sí de Moscú, Washington y Pekín, se aprobó en el Palacio de Vidrio el documento para poner fin rápidamente a la guerra en Ucrania, sin mencionar a Rusia como agresor, ni mencionar la integridad territorial de Kiyv. Después del encuentro con Trump, Macron afirma que «la tregua podría alcanzarse en unas semanas».