Capacidad innovadora de la tradición católica
Diagnóstico general de la educación
Afrontar el presente para garantizar el futuro
Identidad de la Escuela Católica
Tengo que confesar, antes de entrar a fondo con este libro, que estuve en su presentación hace unos días en Madrid.
Un diálogo del autor, entre otros, con el obispo responsable de la Comisión de Educación de la Conferencia Episcopal Española, monseñor Alfonso Carrasco Rouco.
Ya en ese acto quedé noqueado por lo que le escuché al autor.
Capacidad innovadora de la tradición católica
Por ejemplo: “Nadie ha generado más cultura educativa que la Iglesia y el Evangelio”, “No somos conscientes de la capacidad innovadora que tiene la tradición católica”, “El magisterio de la Iglesia desde el Vaticano II en materia educativa es espectacular”, “La razón de la Escuela Católica (EC) es cultural, la educación integral de la persona. Si todos los ámbitos de la EC no están impregnados por la fe, no está cumpliendo la misión de la transmisión cultural que nace del cristianismo”, “Nos sobran recursos pero nos falta identidad”, “La Escuela Católica tiene más recursos que nadie para responder a los retos del presente, pero ¿no estamos a por uvas?”.
Para qué seguir. Se pueden hacer una idea.
Diagnóstico general de la educación
Esto me llevó a meterme con el libro. Les puedo asegurar que es una de las aportaciones más lúcidas que he leído sobre la educación, en general, y sobre la educación católica, en mucho tiempo.
Javier Cortés, para quien no le conozca,-yo personalmente tampoco hasta el día de la presentación- es un religioso marianista que ha dedicado toda su vida a la educación y a la edición. Fue Presidente de PPC y SM, profesor, director de colegios, autor de materiales didácticos. Experiencia, por tanto, no le falta.
Parte de un diagnóstico general de la educación, síntesis de lecturas del autor, de perspectivas diversas por sus procedencias y pensamientos, que hay que tener en cuenta, con el que estoy de acuerdo.
Tomado de Marina Garcés, J. Wagensberg, J. A. Marina, N. Ordine, J. M. esquirol, M. Recalcati, además de Benedicto XVI y del Papa Francisco, entre otros.
Afrontar el presente para garantizar el futuro
La estructura del libro es clara. Utiliza el concepto de la sostenibilidad, traído de la ecología- economía de la naturaleza-, para aplicarlo a la EC entendido como la forma de afrontar el presente para garantizar el futuro.
Pero este concepto no está centrado en la dimensión económica, que se aborda al final, sino en la articulación de la “tradición de la EC”, la identidad, concepto que se repite a lo largo del libro.
La sostenibilidad de la Escuela Católica está basada en la sostenibilidad del Proyecto educativo, de las personas y de la organización. La perspectiva del proyecto antes que la de las personas es original en su lógica demostrativa.
Por cierto que no se mueve sólo en el mundo de las ideas. Baja a detalles incluso sorprendentes, nacidos de su experiencia.
Profundizar en el por qué
Junto a la estructura, lo interesante son las tesis sostenidas que suponen el mejor examen de conciencia, en clave de discernimiento, de la Escuela Católica que he leído en mucho tiempo.
Veamos algunas de ellas:
“Podríamos afirmar que nos estamos centrando mucho en los cómos cuando lo que realmente resulta fecundo es profundizar en el por qué”.
“A mi modo de ver el factor más determinante de la situación actual de la EC no es la disminución de la natalidad, ni los posibles ataques al modelo jurídico-económico sobre el que se sitúa la actividad de la EC desde principios de los ochenta, sino más bien la debilidad institucional de aquellas organizaciones que fundaron, inspiraron, desarrollaron y expandieron lo que hoy llamamos “colegios católicos””.
Una debilidad institucional, cuantitativa, los recursos humanos por falta de vocaciones, y cualitativa lo referida a la identidad creativa en la relación del proceso de gobierno y la tradición educativa propia católica.
Identidad de la Escuela Católica
“Lo que realmente funciona como principio y fundamento es un proyecto educativo poderoso, bien definido y bien arraigado en la esencia de la misión educativa de la Iglesia”.
“Hace ya tiempo que en los proyectos reales de las escuelas católicas el ámbito académico se desligó casi completamente de la fuente de nuestra identidad”.
“La justificación de la EC no reside en que la escuela nos permita “hacer pastoral”. “Es en la tarea de la mediación cultural en la que la EC lleva a cabo su propia y específica aportación a la misión evangelizadora de la Iglesia”.
Podría seguir así, reproduciendo tesis del libro. Permítanme que no siga. Les invito a leer esta propuesta que, sin duda, marcará, un antes y un después en el examen crítico y en las propuestas viables sobre la Escuela Católica.
Por cierto, no sólo estoy de acuerdo con el diagnóstico y la propuesta como profesor universitario, que recibe a no pocos alumnos de la EC. Lo estoy como padre de familia numerosa cuyos hijos se han educado en la Escuela Católica.
La sostenibilidad de la Escuela Católica
Javier Cortés Soriano
PPC
La sostenibilidad de la Escuela Católica. Javier Cortés Soriano.