Gracias al Centro diocesano de Investigación-Acción el Alcohol (CEDIRAA) de Yamena, la lucha contra la toxicomanía está consiguiendo que muchos jóvenes recuperen el sentido y el gusto por la vida. Su directora, la hermana Aurélie Roiné: "Muchas mujeres, por ignorancia, dan alcohol adulterado a los niños. Con nuestra frágil ayuda les devolvemos la dignidad y crecemos en humanidad"