El Pontífice, tras su discurso a los representantes de los medios de comunicación de todo el mundo recibidos en el Aula Pablo VI, quiso saludar a algunos grupos de periodistas. Como regalo, una bufanda de los Andes de Perú y una reliquia del Papa Luciani, después la propuesta de un partido de tenis: «Mientras no esté Sinner» y preguntas sobre los viajes a Fátima y Nicea. «No somos enemigos sino sus aliados».