El gasto militar de la OTAN podría aumentar las emisiones de gases de efecto invernadero en 200 millones de toneladas anuales. Así lo revela un estudio de la ONG Conflict and Environment Observatory, publicado por el diario británico The Guardian. Según los investigadores, el aumento de los gastos en defensa a nivel mundial agravará la crisis climática, que a su vez causará más conflictos.