"No abandonaremos a las mujeres embarazas"
Impugnar la enmienda en la Cámara de los Lores
La postura de la Iglesia de Inglaterra (Anglicana)
Esta medida ha causado alarma entre los obispos católicos y anglicanos y grupos “pro‑vida” que alertan sobre los riesgos médicos y morales de esta reforma que despenaliza el aborto hasta el momento del parto.
Reforma alarmante y extrema
La reacción en contra ha sido inmediata y contundente por parte de los líderes espirituales de la Iglesia Católica y Anglicana, así como de organizaciones pro‑vida, que calificaron la reforma de “alarmante”, “extrema” y un paso hacia la eliminación de la dignidad del no nacido y de la protección a la mujer gestante.
"Estamos profundamente alarmados por esta decisión. Nuestra alarma surge de nuestra compasión por las madres y los bebés no nacidos" ha declarado tras la votación el arzobispo John Sherrington de Liverpool, responsable en cuestiones de vida de la Conferencia de Obispos Católicos de Inglaterra y Gales.
Desprotege a los no nacidos
"Esta decisión reduce significativamente la protección de las vidas de los no nacidos y resultará en un grave daño para las mujeres embarazadas", dijo el arzobispo Sherrington, según recoge Angelus News.
El prelado de Liverpool ha argumentado que con esta medida, las mujeres serán aún más vulnerables a la manipulación, la coacción y los abortos forzados. "Este cambio legal también desalentará la consulta médica y aumentará la probabilidad de usar pastillas abortivas para abortos tardíos peligrosos en casa", ha manifestado.
El arzobispo inglés dejó claro que la Iglesia Católica no va a "perder la esperanza" y continuará trabajando incansablemente "para proteger la dignidad de cada vida".
"No abandonaremos a las mujeres embarazas"
"No abandonaremos a las mujeres embarazadas ni a sus hijos no nacidos en su momento más vulnerable. Agradezco a todos aquellos, dentro y fuera de la Iglesia, que comparten este compromiso y continúan sirviendo a los padres necesitados y a sus bebés".
La enmienda ha sido calificada como histórica. Fue debatida y sometida a votación en la Cámara de los Comunes (sin consulta popular como denuncian los grupos provida) donde ha salido adelante con 379 votos a favor, frente a 137 en contra. Al tratarse de una cuestión ética y de conciencia, los diputados pudieron ejercer su voto de acuerdo con sus creencias personales y no bajo la disciplina de voto de sus respectivas formaciones.
Consentimiento de dos médicos
En la actualidad, el aborto es técnicamente ilegal según la Ley de Delitos contra las Personas de 1861 de la era victoriana, a menos que se cumplan los criterios establecidos en la Ley de Aborto de 1967.
Estas condiciones incluyen un límite máximo de 24 semanas, excepto cuando la vida de la madre esté en grave peligro o el feto presente alguna discapacidad. Se requiere el consentimiento de dos médicos para cada aborto, siempre que la continuación del embarazo represente un riesgo para la salud mental o física de la madre. También es posible obtener pastillas para inducir el aborto en casa durante las primeras 10 semanas de embarazo.
Impugnar la enmienda en la Cámara de los Lores
Por su parte, el obispo John Keenan de la diócesis católica de Paisley, en Escocia, ha lamentado que los diputados votasen en menos de dos horas, sin consulta pública. "Insto a todos a hacer lo posible para impugnar esta enmienda en la Cámara de los Lores", declaró.
El proyecto de ley se debatirá ahora en la Cámara de los Lores. Si no encuentra oposición, el aborto quedaría efectivamente eliminado del código penal por primera vez desde 1861.
La enmienda fue presentada por Tonia Antoniazzi, diputada laborista por Gower, debido, según ella, al creciente número de casos de mujeres procesadas por utilizar píldoras abortivas ilegalmente para matar a sus hijos no nacidos más allá del límite superior de 24 semanas. Sin embargo, entre 1861 y 2022, solo tres mujeres en Gran Bretaña fueron condenadas por abortos ilegales según recoge Angelus News.
Por su parte, la diputada conservadora Rebecca Paul advirtió que, de aprobarse, la nueva ley podría permitir abortos hasta el término del embarazo sin consecuencias legales, algo que describió como profundamente preocupante.
Catherine Robinson, de Right to Life, un grupo pro vida del Reino Unido, acusó a Antoniazzi de secuestrar un proyecto de ley del gobierno para impulsar una agenda radical sobre el aborto."Lucharemos contra esta enmienda en cada etapa de la Cámara de los Lores", dijo.
Tonia Antoniazzi, diputada laborista por Gower.
La postura de la Iglesia de Inglaterra (Anglicana)
Si bien no han emitido hasta el momento un comunicado oficial inmediatamente tras la votación del martes, líderes anglicanos han reiterado en. numerosqs ocasiones su postura: el feto tiene potencial para “pensar, orar, elegir y amar”, y “cada aborto es una tragedia” y que extender la permisividad sin apoyo real a las gestantes es inmoral.
Por su parte, Ana del Pino García Barrera, coordinadora territorial de NEOS y coordinadora de la Asamblea de Asociaciones por la Vida ha calificado este hecho como un "Infanticidio legalizado: Un retroceso moral sin precedentes".
NEOS declara: "La reciente aprobación en Reino Unido y Gales de una ley que permite el aborto hasta el momento del parto representa un hito alarmante en la degradación de la dignidad humana. Esta normativa permite acabar con la vida de un bebé a término por cualquier causa, incluso por razones de sexo o discapacidad".