La parroquia de San Ginés de Madrid se ha visto en la obligación de transmitir a sus feligreses que eviten los donativos y limosnas para aquellas personas que se ponen a la entrada de la iglesia y que están provocando altercados, acoso e insultos. 

Tranquilizan a sus fieles recordando que las personas necesitadas que buscan ayuda y trabajo "reciben el apoyo, la asistencia, la formación y el seguimiento adecuados por parte de la Iglesia, especialmente a través de Cáritas y otras entidades católicas, en colaboración con diversos organismos públicos". Es decir, todo aquel que verdaderamente lo necesite, no se le priva de ayuda social. 

Sin embargo, "aunque la mendicidad callejera es una práctica lamentable, y su financiación propicia la exclusión social y el deterioro humano", desde la parroquia se recuerda que algunos, "habitualmente, para obtener dinero" ejercen "la coacción agobiante, la falta de respeto a las normas básicas de convivencia y al culto religioso, la utilización, en bastantes casos, de argumentos tergiversados o falsos". 

Explican desde la parroquia de San Ginés que desde hace un año y medio, tanto los sacerdotes como los fieles vienen "sufriendo el acoso, los insultos, las blasfemias, e incluso los intentos de agresión física, de personas que se colocan en la puerta de la parroquia y que han convertido la mendicidad en su trabajo profesional". 

Y sobre todo el agravio continuado que sufren las mujeres, feligresas y turistas, que entran en el templo, y que son objeto de un acoso plagado de groserías y obscenidades.

Toda esta situación les ha llevado a llamar a la Policía "en multitud de ocasiones que, para nuestra desgracia, y a pesar de su buena voluntad, sólo puede llamarles la atención", se lamentan desde el equipo de la parroquia. 

Por todo ello, no tienen más remedio que lanzar esta advertencia: "Les pedimos a ustedes que eviten los donativos para estas personas que solo contribuyen a la extensión de los lamentables problemas mencionados. En cambio, tengan la seguridad de que en Cáritas Parroquial de San Ginés, las cosas se hacen de modo adecuado y oportuno".